1 de Mayo

A estas alturas, 2008, el 1 de mayo se celebra más bien como una fiesta anecdótica. Sin embargo, todo tiene su trasfondo histórico.

El primero de mayo tiene su origen en EE.UU. en el año 1886 en la llamada Revuelta de Haymarket. Ese día, más de 200.000 obreros fueron a la huelga para reivindicar una jornada laboral de 8 horas. Se planteó como una manifestación pacífica, pero ya se sabe lo que ocurre en toda movilización, siempre hay alguien que rompe el orden, y allí no fue menos. Debido a la violencia con la que la policía intentaba disolver el acto, ese anónimo lanzó una bombra contra los cuerpos represivos del estado. No se encontró al verdadero culpable, pero aún así, la justicia condenó a cinco anarquistas a muerte en un juicio injusto y sin pruebas. Los condenados han pasado a la historia como los Mártires de Chicago

La noticia estremeció a los socialistas y anarquistas de todo el mundo. En 1889, la Segunda Internacional celebrada en París, acordó el 1 de mayo como fecha simbólica. Por un lado serviría como homenaje a los Mártires de Chicago, y además, por el otro sería la fiesta de los trabajadores.

En España, dejó de celebrarse con la llegada de la Dictadura de Primo de Rivera, volvió con la II República, Franco la aprovechó y la modificó para darse un baño de multitudes de la manera más populista, y retornó con más fuerza que nunca en la Transición.

Actualmente, debido al adormecimiento de la sociedad, el uno de mayo ha dejado de ser la fecha reivindicativa por antonomosia para pasar a ser un puente más en el calendario. Una pena porque todavía queda mucho por lo que luchar.